Para pedir por la lluvia abundante, por cosechas exitosas y la fertilidad, habitantes de esta comunidad iniciaron una de las festividades más antiguas y más relevantes para la población, la que es en honor al Divino Señor de Ayuxi, conocido también como el Señor de la Luz.

De acuerdo con los archivos, Yanhuitlán, palabra en Náhuatl que significa Pueblo nuevo y para otros traductores, Llano grande; fue uno de los primeros pueblos cuyos nativos fueron conquistados por los españoles y evangelizados por los Dominicos.

La profesora Luz del Alba Cruz Pérez dio a conocer que la celebración en su honor, data del siglo XVI o XVII, cuya imagen está hecha de corazón de la caña del maíz y de madera del colorín.

Durante todo el año, la imagen permanece en la capilla de El Calvario pero cada 29 de abril, es llevado desde ahí al templo de Santo Domingo, en una procesión embellecida por tapetes de aserrín, flores y juegos pirotécnicos, donde permanece durante todo el mes de mayo.

En este lapso, habitantes de Yanhuitlán acuden a visitarlo, a las actividades que se hacen en su honor, misas, velaciones con una importante participación de niños y niñas que van con flores a visitarlo.
El último domingo de mayo es cuando se hace la actividad más grande; se hace una calenda, se quema pirotecnia, hay eventos deportivos, culturales y sociales, y se hace tocar el órgano del templo, que tiene una antigüedad muy importante.

En estos eventos, también participan las peregrinaciones de Puebla, Oaxaca, paisanos que radican en Estados Unidos, ya que yanhuitecos hay hasta en Hawái.

¿POR QUÉ LE ADORAN?

Los prehispánicos tenían una visión del mundo muy especial, para ellos, la cosecha, la siembra, el maíz, era primordial porque de eso vivían, entonces lo que hacían es adorar a sus dioses, entre los que estaba el Chipe Totec, Dios de los desollados, y a quien también le rendían culto como Dios de la fertilidad.
Entonces, con el inicio de las lluvias, hacían una gran ceremonia para dar gracias de que la tierra fuera a regenerarse y dar sus frutos, por lo que hace la festividad de la fertilidad.

Los prehispánicos tenían su vida muy relacionada con el estudio de las estrellas, los planetas, etcétera, y lo mismo su orientación geográfica, por lo tanto, la procesión del Divino Señor de Ayuxi que se lleva a cabo en la actualidad, consiste en un recorrido de Norte a Sur, como hacían los antepasados.
“Esto tenía mucho que ver con establecerse, orientarse, obtener los beneficios no sólo de la tierra sino del sol”, informó.

LA ORGANIZACIÓN

Habitantes de esta comunidad anteriormente tenían la costumbre de conformar mayordomías para que fueran ellas las que se hicieran cargo de sacar adelante a las fiestas.

Cruz Pérez dio a conocer que esta situación, de acuerdo con las notas del archivo general, de donde sustrajo la información vertida en esta entrevista, era para los españoles algo excesivo, “se enojaban por los gastos que se realizaban”.

Y es que los mayordomos, como es tradición en muchos pueblos de la región Mixteca, se encargan de realizar los eventos de la fiesta en el ámbito cultural, social, por supuesto el religioso, haciendo gastos de millones de pesos en algunos casos.

“Los mayordomos son muy bastos, eso le molestaba a los españoles, pero esto va de acuerdo con su fe, así que se sigue conservando aunque no en esta festividad de Yanhuitlán donde existieron los mayordomos hasta hace alrededor de tres años, porque con los gastos que representaba y las condiciones de la zona, es más difícil hacerlo, a partir de ahí, se conforma una comisión y se distribuyen las tareas aunque la gente no tiene reparo en dar”, expuso.

RIQUEZA HISTÓRICA

Esta es una de tantas riquezas que posee Yanhuitlán, que fue un centro ceremonial muy importante para los mixtecos, prueba de ello, es que en el cerro del Jazmín encontraron el escudo de armas o de guerra de los mixtecos, el Chimalli, que también es un nombre náhuatl.

Además, este municipio es el que encabeza el Geoparque de la Mixteca Alta, el cual es un territorio bien definido con un importante patrimonio geológico, caracterizado por un conjunto de sitios de interés por su gran valor científico, estético y educativo, por la singularidad y rareza de sus elementos geológicos y geomorfológicos, explicó la maestra Oralia Oropeza, encargada del Instituto de Geografía de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM).

Además, los geoparques cuentan con otros tipos de patrimonio (arqueológico, ecológico, histórico o cultural), en el que su manejo y gestión se fundamentan en la geoconservación y el turismo sustentable de la comunidad donde se encuentra.

Los geoparques son impulsados por el departamento de Ciencias de la Tierra de la UNESCO, representan un nuevo modelo de impulso cuyo principal objetivo es favorecer el desarrollo local del territorio al que se le asigna esta categoría, a través del turismo sustentable y alternativo de los recursos geológicos, también se busca la participación y trabajo con la propia población que vive en esos lugares o de aquellas personas que los visitan, propiciando el respeto al ambiente en el que se aplica.