Por tercer año consecutivo cientos de personas se dieron cita en la agencia municipal de San José Chichihualtepec, en la Mixteca Baja, la cual se ha posicionado como una de las principales poblaciones productoras de la pitaya de mayo y con la mejor calidad, fruto exótico del desierto que actualmente se vende en diferentes restaurantes y en tiendas de Estados Unidos.
SOBRE LA FERIA
“La Feria de la Pitaya tiene el objetivo de fortalecer las economías comunitarias y el turismo biocultural. Productores, artesanos y cocineras tradicionales tienen la oportunidad de ofrecer sus riquezas a los visitantes, lo cual no sólo los ayuda económicamente, pues la identidad, las tradiciones y la cultura del pueblo se ven fortalecidas cada año”, mencionó Anastasio Villarreal Díaz, organizador de la feria.
Resaltó que este año el pueblo de Chichihualtepec se organizó para rescatar sus tradiciones, como la danza de los Tekoolos, hombres enmascarados que representan a los antiguos mensajeros que tenían que cubrir su rostro para evitar que fueran descubiertos. Asimismo, dijo que los adultos y jóvenes conformaron el primer y el segundo grupo de danza folclórica de Chichihualtepec, quienes durante la inauguración de la feria mostraron un gran repertorio de expresiones artísticas que llenaron de algarabía la explanada de la comunidad.
APOSTAR POR LAS COMUNIDADES
Rita Lorena Ramírez, presidenta de la Ruta de la Mixteca, subrayó que hay un grupo de empresarios interesados en apostar en las comunidades para fomentar las riquezas que todavía no son mostradas al mundo e impulsar su economía fortaleciendo las actividades productoras, como es el caso de Chichihualtepec y sus ricas pitayas. “Es un orgullo ver que una comunidad se organiza para lograr su desarrollo. Estamos seguros que cada año esta feria irá creciendo hasta posicionarse como una de las más importantes de la Mixteca”.
El agente municipal Eusebio Marín López recuerda que hace tiempo había más pitaya y menos plagas, pero actualmente hay más interés por recuperar esta tradición, logrando que el producto sea más cotizado. “La mayoría de las familias se dedican a la cultivo de pitayas. De nueva cuenta este año vamos a exportar pitayas a Estados Unidos, queremos meter más de 10 toneladas para que nuestros paisanos y la gente que no conoce nuestra fruta pueda deleitarse y al mismo tiempo beneficiar a nuestra gente”.
CONOCER SU HISTORIA
Eusebio invitó a conocer la historia de su pueblo a través del museo comunitario Yukuni’i, de su templo y de los huertos de pitayos, los cuales son tratados por los habitantes como un integrante más de las familias; hablan con ellos y los protegen.
De acuerdo con el empresario César Aguirre; actualmente, la pitaya de Chichihualtepec se vende en diferentes establecimientos de Nueva York, Connecticut y Nueva Jersey, por 40 dólares la caja.