TEXTO: LUCIO GOPAR
FOTOS: OMAR MAYA CALVO
La entidad oaxaqueña es privilegiada en cuanto a su patrimonio turístico y natural; hablar de Oaxaca requiere mucho espacio y tiempo para abarcar su grandeza.
En esta ocasión nuestra recomendación es el pueblo de Santa María “El Tule”, un bello lugar muy cercano a la capital del Estado, pues se ubica tan sólo a 15 minutos por la carretera internacional 190, rumbo al Istmo de Tehuantepec.
Es uno de los tantos motivos por los cuales los oaxaqueños nos sentimos orgullosos, el saber que la naturaleza nos regaló el árbol que tiene el diámetro más grande del mundo. Este árbol tiene más de 2 mil años de vida, es un “ahuehuete” que tiene 44 metros de circunferencia y su copa alcanza hasta los 58 metros. Su tronco tiene 14 metros de alto y con sus ramas llega hasta los 42 metros. El volumen alcanza los 816 mil 829 m3. Y pesa aproximadamente 636 toneladas.
Obviamente el árbol de “El Tule”, porque así se llama el municipio en donde se encuentra, se ha vuelto una “parada obligatoria”, en los tours que hacen los guías de turistas que llevan a los visitantes a la zona arqueológica de Mitla y a Hierve el Agua.
Actualmente se abrió una caseta de cobro de parte de la autoridad municipal, siendo una cooperación de $10.00 para tener acceso a donde se encuentra el árbol, mismo que está protegido en su contorno con una reja.
Como un apoyo para los niños más destacados en la escuela, solo seis niños (de entre 8 a 12 años de edad), tienen permiso de la autoridad para poder orientar a los turistas y están identificados con una credencial, actividad por la cual reciben propinas para poder ayudarse en sus estudios. Los niños muy entusiasmados por hacer esta actividad, practican idiomas y se han aprendido las figuras que se encuentran en el árbol, algunos saben estas palabras hasta en cuatro idiomas.
Vale la pena pasar un día completo en “El Tule”, ya que además de este magnífico ser vivo, Santa María es un pueblo 100% provinciano, tranquilo y con comida a la usanza de los pueblos de los Valles Centrales de Oaxaca, en donde predominan las quesadillas de quesillo con flor de calabaza, siendo otro de sus atractivos de la gastronomía las empanadas de mole amarillo y mole verde con carne de pollo, al comal y de maíz natural.
Es tan famoso el sabor de estas quesadillas y empanadas que inclusive hay una “Feria de la Empanada” que coincide con las fechas de “Los Lunes del Cerro” empezando el tercer lunes de julio y terminando en la octava. De manera que quienes vienen a presenciar “La Guelaguetza”, pueden pasar a degustar de esas deliciosas empanadas y quesadillas.
LA FIESTA DEL PUEBLO
Está dedicada a la Virgen de “La Asunción” iniciando el primer domingo de agosto mientras que el 13 de agosto se realiza un convite.
En este 2019 de 17:00 a 19:00 hrs., estarán participando cuatro bandas de música: una auspiciada por el Comité Pro Festejos de “La Asunción” y tres que pondrán las 3 partidas de policías tradicionales. Además participan “Las chinas oaxaqueñas”, bailando los sones y jarabes del valle, participando las mujeres del municipio de Santa María “El Tule”. Además también se queman “toritos”, y adultos y niños con figuras pequeñas de carrizo y pólvora, bailan para después quemar esas figuras.
La fiesta es abierta para quienes deseen participar, todos son bienvenidos, incluyendo los turistas de diferentes partes del mundo. La quema del castillo la hacen la noche del día 14 de agosto, realizando la misa de la fiesta con tres sacerdotes; el día 15 de agosto que es el “Día de la Asunción”, pero la fiesta continúa. El día 16 de agosto, hacen una “regada de dulces” a las 4 de la tarde en la explanada del palacio municipal. Los días 17, 18 y 19 de agosto, tres días de misa, jaripeo y baile gratis, en la explanada del Palacio Municipal, organizada por la primera, segunda y tercera partida de policía tradicional. Cada uno de esos días, tienen una reina a la que llaman “encabezada”, además participan madrinas que entregan los premios en el jaripeo a los jinetes.
Siempre es bonito poder pasear por este pueblo y tomarse fotos para las redes sociales, los retablos de su templo tienen laminillas terminadas en oro, lo cual tiene una gran belleza y atracción para los turistas.
Gente emprendedora
Una mujer emprendedora que como tantas oaxaqueñas han sabido afrontar la vida con mucho coraje, con mucha pasión y con mucho trabajo para sacar a su familia adelante, es Wendy Ramírez Jarquín, nacida en Santa María Ecatepec en la región de Yautepec, y quien tiene ya casi una década viviendo en “El Tule”.
Wendy, después de mucho trabajo y esfuerzo en colaboración con su familia, lleva a cabo la cadena productiva de su propio mezcal.
Wendy dice que con este trabajo ha podido salir adelante, sin embargo lo que le da mayor satisfacción es que son muchas las familias que tienen un trabajo gracias a este proyecto. Asimismo dice estar agradecida con todos ellos por el papel que cada uno desempeña.
Wendy explica que aquí en “El Tule” llegan visitantes de todo el mundo “yo les recomiendo que lleven el producto como un recuerdo de Oaxaca, para ellos mismos, o para familiares y amigos que los esperan de regreso” dice.
“Nosotros ofrecemos una gran variedad de mezcal como lo es el blanco, blanco abocado con gusano de agave, reposado, añejo, añejo reserva especial y cremas de mezcal de agave, de sabores como moka, capuchino, cajeta, nuez y maracuyá”.
Asimismo explica que es gracias a este proyecto que ha podido sacar adelante a su familia y a muchas otras más que colaboran con ella y que se encuentran atendiendo en la calle Centenario 63 a unos pasos del conocido árbol del tule.
Y con esta recomendación los invitamos a que visiten este mágico pueblo y aprovechen la oportunidad de conocer una de las más grandes maravillas de la naturaleza.