La más grande fiesta religiosa en Tlaxiaco, da movimiento y llena de alegría las calles de la ciudad. En ella participan la mayordomía, los padrinos de calenda, y toda la población, en una festividad llena de tradiciones que se desarrolló del 13 al 18 de agosto.
Tres carros de calenda recorrieron las principales calles de la ciudad de Tlaxiaco durante dos días. También se hicieron presentes las danzas, bailes, diablos y marmotas, doncellas y pasajes bíblicos, acompañados de la música de viento.
Simitrio Robles Ibáñez, nativo de Tlaxiaco y ganador al Premio Nacional del Periodismo, da a conocer que sin esta fiesta patronal la ciudad no tendría la misma visibilidad, pues las actividades religiosas han concentrado el mayor número de visitantes y locales en esta ciudad.
Las actividades culturales y sociales no han logrado concentrar tanta gente como lo hace la procesión de la Virgen de la Asunción o el desarrollo de los carros de calenda, donde una multitud se da cita en las calles para admirar cada una de las representaciones que realizan y donde se hacen presentes las comunidades que presentan sus tradiciones y otras algarabías.
Lo religioso es el motivo por el cual se desarrolla la mayordomía, un cargo que no dejar de realizarse; por otra parte los padrinos de calenda presentan lo mejor y en el desarrollo se muestran las expresiones culturales nativas.
Los tapetes
Robles Ibáñez dio a conocer que la construcción de tapetes en Tlaxiaco lleva cinco años efectuándose en honor a la Virgen de la Asunción. Una tradición antigua que se retoma en esta población Mixteca, como en aquellos tiempos que recibían de esta forma a los reyes y a la personalidades importantes. Se hacen mediante tequios y participaciones de todos los vecinos, se colocan en cuatro calles, recorrido que hace la Virgen de la Asunción durante la procesión: en Claudio Cruz, Hipódromo, Independencia y Colón, aproximadamente 4 kilómetros de construcción de tapetes que llevan la simbología de Mixteca y en honor a la patrona de Tlaxiaco.
La procesión se llevó a cabo por las principales calles, recorriendo cada uno de los tapetes, miles de personas se dieron cita, cargadores y cargadoras de manera ordenada dieron sus hombros para llevar en procesión a la Virgen de la Asunción.
Cupo excedido
Cada año son más católicos que llegan a la adoración de la virgen, tanto que ya no hay espacio para todo ellos en la parroquia de Tlaxiaco. Por esta razón se ha tenido que optar por la colocación de módulos de lona, sin embargo en esta ocasión se utilizó la explanada “Benito Juárez” para ofrecer la misa, aunque el espacio tampoco fue suficiente y muchos de los feligreses tuvieron que usar sombrillas para cubrirse del sol.
Voluntarios
Ángel Ramírez Jiménez, coordinador campanero e integrante del comité de conservación y organización de la parroquia, dio a conocer que todos los cargos para festejar a la virgen son voluntarios. Como ejemplo de ello, se sabe que ya existe padrino de vestido hasta el año 2040. Los voluntarios arriban a la iglesia y piden ser anotados en una lista para asumir por propia voluntad diversos cargos a desempeñar.
“Llegan muchos apoyos a la iglesia para venerar a la virgen, este año una persona y su familia, Artemio Salazar y su esposa de Acatzingo, Puebla, adornaron la iglesia e hicieron de ella un jardín de flores de las más hermosas, son contribuciones de las que muchos están esperando turno para aportar” explicó.
En esta ocasión la familia Gaytán Hernández, García Cruz y la unión de tablajeros, han contribuido con los mayordomos, Cruz Bernal, para lograr una festividad de mucho colorido y fe; se ha logrado que cada uno de ellos hiciera su desempeño de manera extraordinaria.
De manera espontánea y voluntaria las personas llegan y se anotan en un libro sobre sus participaciones, firman, por ejemplo hasta el año 2021, 2024, que ya están inscritos los padrinos de calenda, pero que desde luego está abierta la convocatoria para quienes quieran seguir adoptando los demás cargos.
El recorrido
En el recorrido de los carros alegóricos, las damas muestran sus trajes tradicionales además de realizar algunas representaciones, ya sean danzas o bailes de las comunidades.
Joel Vásquez Rodríguez, representante de la unión de expendedores de carnes y sus derivados de Tlaxiaco, explica que la cultura está presente en los recorridos que hacen los carros de calenda y es un buen ejemplo que se da a la juventud.
Esta unión ha asumido el cargo de manera responsable y es una organización que tiene más de 40 años y cuenta con 52 integrantes, quienes han logrado sacar adelante esta encomienda asumiendo el cargo de padrino de calenda.
Cada uno de los integrantes dio su aportación para cumplir con un cargo comunitario que se hizo de manera voluntaria y a invitación que les hicieron los mayordomos de la familia, Cruz Bernal, se hizo trabajo de equipo y la calenda mostró cabalgata de caballos y otros aspectos.