La elaboración de las tradicionales piñatas, que son un elemento necesario para divertirse en las posadas y la Noche de Navidad, se mantiene vigente e incluso se moderniza con nuevos modelos.
En la Avenida 16 de septiembre de la agencia municipal de 5 Señores se encuentra un local en donde se fabrican las piñatas, la fachada del inmueble luce llena de este tipo de productos en diversos colores y modelos.
Con varios años de dedicarse a esta actividad, Zuriel Verdugo Méndez indicó que en este lugar se fabrican piñatas de cartón con molde de pelota de plástico y la tradicional de olla que se hace en la cercana población de Santa María Atzompa.
“Durante la temporada navideña se confeccionan piñatas tipo estrella de cinco puntas y la tradicional siete picos y cuando en otras ocasiones los clientes solicitan especiales las hacemos de 15 picos, para el festejo de los 15 años”, compartió el piñatero.
Significados
La piñata de siete picos representa los siete pecados capitales, los colores brillantes simbolizan la tentación y el golpearla con los ojos vendados es la representación de la fe ciega para vencer al pecado y destruir la tentación y recibir riquezas del cielo.
Explicó que también las personas buscan las piñatas pequeñas de olla o de cartón que se utilizan para adornar los domicilios, así como los faroles o los palos con los cuales se rompe la piñata.
Innovarse o morir
El trabajo es muy meticuloso por los detalles que hay que hacerle a estos trabajos, como ten odo, cada año se va innovando, tal es el caso que en este año se están haciendo las piñatas con los conos transparentes.
Este tipo de piñatas no se habían visto en el Estado de Oaxaca, solamente existían en otras entidades como el Estado de México, “nosotros acudimos a recibir cursos a ese lugar y de ahí nos traemos las novedades”, apuntó.
“En ocasiones, algunas personas piden que se les hagan sus piñatas de manera especial, tal es el caso de las piñatas de 15 picos y las de cualquier otro mono, lo cual es muy laborioso”.
Verdugo Méndez abundó que hacer una piñata lleva todo un proceso, “si se trata de una de olla puede estar en un rato, porque ya viene el molde, sólo hay que colocar los picos, lo que lleva más trabajo es la de cartón que se hace en uno o dos días”.
“Mi esposa y yo trabajábamos en las bodegas del Mercado de Abasto, fue en donde tomamos la decisión de dedicarnos a este tipo de trabajo artesanal, por lo que asistimos a un curso para la elaboración de las piñatas”, comenta el artesano.
Las piñatas son una tradición que se tiene muy arraigada entre la población, la gente va a comprar una para su posada o para adornar su casa, acude de todos tipo de personas y de diversos estratos sociales.
Los precios varían de acuerdo al tamaño y al modelo, una piñata grande de cartón se puede encontrar desde 300 o 400, una de olla puede llegar a valer entre 500 y 600 pesos, sin embargo, existen unas desde 20 pesos
“La tradición se conserva, no se ha ido perdiendo lo que ha bajado son las ventas, el año pasado en estas fechas se habían vendido alrededor de 50 grandes, pero ahora solamente se ha vendido la mitad”.
Sin embargo, la piñata que se utiliza durante las tradicionales posaditas es la que más se vende en esta temporada, “la tradición de las piñatas no se pierde al contrario ha retomado fuerza en los últimos años”, comentaron diversos ciudadanos.
Eliseo García, quien acompañado de su familia buscaba comprar una piñata, al final, dijo que en la colonia en donde tienen su domicilio, se mantiene viva la tradición de romper una piñata a la medianoche del día 24 de diciembre y de igual forma en las posaditas.
Precisó que en los eventos participan todos sus familiares, así como algunos vecinos en donde tienen su domicilio desde hace más de 40 años, “antes cada uno hacía su piñata, pero de unos años para acá se juntan todos esa noche”, cerró emocionado.